PADRE ZAMEZA, S.J.

• Me puesto en contacto con el Zameza, subdirector de la revista El Siglo, y le he pedido ayuda para nuestro proyecto de crear en el Colegio una biblioteca especializada en obras y revistas de carácter misionero… (Pág. 55)
• Anteayer estuvo aquí el Zameza. Fue nuestro primer encuentro desde que empezamos a escribirnos hace unos meses…Hablamos de la soledad del misionero tal como yo la he concebido siempre… (Pág. 58)
• Enseguida le he escrito al Zameza y le he pedido que se pase por aquí lo más pronto que pueda, porque tengo mucho que contarle y algo que consultarle… Lo que sí he hecho es felicitarle por el trabajo que ha realizado con el señor Arzobispo de Burgos, Cardenal Benlloch…Le he pedido que me traiga una copia… (Pág. 59)
• También le he pedido colaboración al Zameza. En enero regresará de Holanda. Sé que estará muy ocupado, pero tratándose de misiones… (Pág. 60)
• He recibido carta del Zameza. Le veo preocupado. Y todo porque cree que hay poca orientación en el trabajo misionero. (Pág. 68)
• Con el Zameza tengo muchos puntos en común y uno de ellos es la dificultad para exteriorizar nuestros sentimientos. Es una de las desventajas del carácter vaso, pero necios tenemos que ser si dejamos de alentarnos por no vencer esta dificultad…. (Pág. 69)
• El Zameza publicará cada día un artículo breve en la prensa de Bilbao. Y, además, estamos imprimiendo unas hojas sobre nuestra misión en China. (Pág. 83)
• El domingo pasado nos visitó Dª Victorina. Mostró muchísimo interés en que le visite el Zameza… (Pág. 87)
• Ha sido un día muy lleno y de sentimientos encontrados. He echado mucho de menos al Zameza… (Pág.94)
• El lunes 16 estuvo aquí el Zameza. Vino a decirnos que ya estamos admitidas por monseñor Rego para la misión de Carolinas… (Pág. 100)
• Necesito cambiar impresiones con el Zameza antes de que se nos adelante Dª Victorina… (Pág. 104)
• La despedida de la expedición a Carolinas…El Zameza se encargó de la homilía. (Pág. 107)
• En Bérriz hay un gran entusiasmo tanto por China como por las Islas. Además, nos están aconsejando que fundemos en Japón. Nos animan los PP. Faber y Zameza… (Pág. 117)
• Pero con quien necesito estar sin falta, antes de marcharme, es con el Zameza. Me bastan dos horas. Ya le he dicho que esta vez no puedo prescindir de cambiar impresiones con él... (Pág. 121)
• He recibido una carta del Zameza tan afectuosa, que me ha conmovido. Hay momentos en que se agradecen mucho esas manifestaciones de cariño. Es muy bueno conmigo y para con nosotras. No sé qué más podrá hacer en adelante que ya no haya hecho. Nunca me he puesto a decirle lo mucho que agradezco esa manera suya de buscar nuestro mayor bien. Tampoco es necesario que se lo diga, porque nos comprendemos y él lo adivina, como yo comprendo y adivino sus cartas por breves que sean. Pero ahora es diferente. Siento necesidad de decírselo como si me marchara para no volver y quisiera que supiera que lo llevo dentro de mí. Que el Señor le bendiga, como deseo y como se lo pido siempre. Siempre. (Pág.121)
• Hubiera dado cualquier cosa por tener aquí al Zameza… (Pág. 191)
• Carta del Zameza. Me ha conmovido su afecto y la bondad de su corazón. Una palabra suya vale para mí mucho más que muchas otras… (Pág. 196)
• El nombramiento del Zameza es ya un hecho y tendrá que trasladarse a Roma. Ya ha pasado por aquí para despedirse. Me cuesta muchísimo la separación, pero lo asumo con gusto. (Pág. 220)
• He empezado el trabajo sobre “Nuestro Espíritu”. Hace tiempo, hice el esquema con el Zameza… (Pág. 223)
• He recibido carta del Zameza. Me alegro de que esté disfrutando de ese ambiente de altura que le rodea. Doy gracias a Dios porque está desempeñando un trabajo tan apropiado para colmar sus deseos de ciencia verdadera y para hacer amistades grandes, hondas, sinceras. Se lo merece por más que diga que tiene alas como de buitre viejo, bien sé yo que son de águila, capaz de volar a lo más alto. Cuando venga participaremos todas de esa abundancia de vida que él sabe comunicar tan magníficamente. Antes, participaba yo sola de su trato, de sus enseñanzas y de sus criterios amplios. Ahora, le conoce toda la Comunidad, y le echan de menos y quieren tenerle cerca… (Pág. 233)
• También ha llegado de Roma el Zameza. Está en Bérriz escribiendo un nuevo libro que le absorbe, por completo, su tiempo y atención. Va a ser algo muy bueno sobre Jesucristo y muy apropiado para editarlo este año centenario de la Redención… (Pág. 241)
• En Bérriz seguimos disfrutando de la compañía del Zameza… (Pág. 242)
• El Zameza, que tiene acierto, lo guzga muy conveniente (el viaje de la M. Margarita a Roma) … (Pág. 249)
• Empiezan las conferencias “Luces de Redención” del Zameza. Sublimes descubriendo a Jesucristo. La gracia mayor que Dios puede hacerme según lo que mi espíritu anhela y lo que para la formación del Instituto quiero. (Pág. 249)
• Carta del Zameza. Me dice que goza viéndonos en el regazo de Dios… (Pág. 260)

Siempre he apreciado y deseado la comunicación con el P. Zameza, pero ahora infinitamente más. Durante todo este año su recuerdo me viene unido a Dios, lleno de paz, de gratitud, y envuelto en “luces de redención” que me descubren un mundo nuevo… A la amistad con el P. Zameza le debo una vida nueva, llena de verdad y de gozo en Dios por Jesucristo. Me ha descubierto tesoros que para mí eran casi escondidos y que de pronto tengo a mi disposición. Ojalá que este año se sienta tan inspirado como el año pasado y escriba algo semejante… (Pág. 270)